El proyecto consiste en la recuperación, intervención y rehabilitación de un inmueble del siglo XIX, que pertenecía al convento de San Francisco, ubicado en el centro del casco histórico de Talca.
Se conservaron y repararon los muros de adobe y las cerchas de madera originales, además, se reforzó la totalidad del edificio con una estructura de hormigón y acero.
Actualmente el edificio funciona como un espacio de trabajo colaborativo en donde se arriendan estaciones de trabajo y estacionamientos para profesionales, estudiantes, etc. En ese sentido, este tipo de ejercicios reflejan una búsqueda por reactivar edificaciones en deterioro presentes en el casco histórico de las ciudades, fomentando la incorporación de nuevos espacios y usos a la ciudadanía.